domingo, 23 de junio de 2013

GRACIAS

Hace demasiado tiempo que no escribo. Demasiado. No por falta de ganas o de motivación; sino precisamente por falta de tiempo. Y es paradójico que, en plena época de exámenes, me arranque a escribir pero quizás es precisamente por eso por lo que, después de tanto tiempo, he decidido deslizar mis dedos por esta pantalla. O quizás sea el inminente viaje que pronto voy a hacer lo que me haya echo arrancarme, o quizás todo y nada al mismo tiempo. 
Hoy me he levantado con una sonrisa, una sonrisa porque he echado mi mente atrás y me reído al ver todo lo que he cambiado, todo lo que he evolucionado, todo lo que he mejorado y, estas palabras que escribo con tinta de mi alma no son otra cosa que un agradecimiento a todos aquellos que han hecho que hoy sea como soy; a todo@s los que alguna vez se subieron al tren de mi vida y marcaron con una huella mi forma de ser hoy. 

Siempre decimos a todos los que nos rodean aquello que está mal, aquello que no nos gusta, criticamos las actitudes de los que más queremos, sólo para que mejoren, pero, demasiado a menudo, se nos olvida darles las Gracias por todas aquellas cosas que nos dan, por todo aquello que nos aportan... Pues yo animo a hacerlo sin razón, sin ningún porqué. Porque sí...
Y eso es lo que voy a hacer hoy... Dar las Gracias a todas aquell@s que han hecho que hoy tenga una sonrisa; porque, como dice Audrey Hepburn "Me gusta la gente que me hace reír. Sinceramente, creo que reír es la cosa que más me gusta. Cura una multitud de males y es probablemente la cosa más importante en una persona." Sé que muchos se me olvidarán, a otros no los nombraré adrede, por multitud de razones, pero si que, desde el anonimato les agradeceré que me hayan hecho sufrir o sufrir y reír a partes iguales porque, aunque en ese momento no lo valoraba, es ahora cuando me doy cuenta que son ellos los que  han hecho de mí una mujer más fuerte, los que, al hacerme caer, han creado un obstáculo que me ha obligado a rehacerme y levantarme más llena de energía, más llena de posibilidades, más llena de vida... porque, como dice Marie Curie "El camino del progreso no es ni rápido ni fácil" A todos ellos, Gracias también.
Si por alguien quiero empezar es por mi familia. Sobre todo por mi madre, por estar siempre ahí y ser mi pilar siempre, dispuesta a sacrificar TODO por mí. Gracias de veras. A mi padre, por ser mi mejor crítico, por seguir siempre mi camino intentando evitar que caiga en los mismos errores que él. Gracias. A mis hermanas Marta y Araceli. A Araceli por ser una pequeña luz que me dio fuerzas sólo al nacer, por no querer hablar por teléfono cuando tardo mucho en volver a casa, por ser la culpable de que mi cuarto esté empapelado de dibujos (mucho mejores que los de Pablo Piccaso) por esa inocencia de niña pequeña, por ser mi chicuela, bichuela y habichuela a partes iguales, porque te quiero. Gracias. Y en especial a Marta, por ser mi compañera de aventuras desde que tenía 3 años. Por ser la mejor hermana que nadie podría tener, por esa sonrisa que puede iluminar el mundo entero, por todas las regañinas, por todas las aventuras, por cuidarme siempre (a pesar de ser más pequeña), por rescatarme en uno de los peores momentos, darme toda la fuerza y energía que necesitaba y llevarme hasta los que son hoy los mejores amig@s que podría tener. Gracias Peque, no sabes lo que supusiste para mí en ese momento. No sé qué habría hecho sin tí. Sólo espero poder hacer yo lo mismo algún día por tí. Siento si te he fallado, siento si te estoy fallando. Gracias, simplemente, por ser tú. Te quiero.
A mi familia en general, mis tíos  Araceli, Rosa, Manolo, Juan Carlos, José Antonio, María Jesús, Sonia, Chari, Miguel, por escucharme, regañarme, acompañarme... por todo. Gracias. Y Gracias también a tod@s mis prim@s, en especial a Rosa y Miriam con quiénes tantos buenos ratos he pasado, con quiénes tantos momentos buenos (y malos) he compartido, con quiénes tanto me he reído, con quiénes tanto me queda por reír, por formar conmigo "Son de Rizos", por esas tardes de cartas, parchís y Singstar a partes iguales, por acompañarme en este Mayo. Gracias. Y también a mi primo Juan Carlos, por ser mi más ferviente compañero de juegos en la infancia, y por bailar conmigo un vals enfrentándose a esa vergüenza de adolescente que todos hemos sentido a su edad. Gracias guapo.
A mi tito Javi y a mis dos abuelos, por hacerme más fuerte.
Gracias también a los que, muchas veces os he dicho, sois mi 2ª familia (espero no olvidarme de ninguno, si es así lo siento) Pedro Palomino Muñoz, Ángel y Sergio; por formar ese trío tan fantástico que nos hace reír, a esos Erasmus por hacernos tanto sufrir dejando que los echemos tantísimo de menos, por acompañarme en un magnífico viaje a Londres que me curó tantas heridas, que me hizo reír tanto, que me hizo quereros tanto. A Juan Cuadra, por compartir tan fervientemente estos momentos tan importantes, a Ana, por dejarme entrever tantas cosas buenas que esconde y darme tantas ganas de conocerla más. A Raquel, por ser la psicóloga del grupo, con la que nadie puede enfadarse, porque no hay niña más dulce que ella. A María José, por hacer que tenga tantas ganas de acercarme más a una persona que ha sabido afrontar momentos difíciles con una sonrisa preciosa que espero que siempre te caracterice. A Mari, por su descaro, por su sinceridad, por darle siempre ese punto divertido a las cosas, hasta por sus enfados, creo que eres la única persona cuyos enfados hacen reír. A Belén Otero, por ser como eres, por dejarme aprender de tí y porque espero que pronto puedas deshacerte de todo lo que no vale la pena. Ahí estaré yo para ayudarte cuando te veas preparada. A Inma, a Ara Molina, a Paqui, a Jenni, a Elvira, a Alicia, a Araceli Miranda... y a tod@s aquell@s que se me olvidan pero que al leer esto sabrán que deberían estar aquí. A tod@ Gracias, por aguantarme, por acompañarme en viajes como Conil, por cambiar mi punto de vista, por hacerme ser quien soy... Gracias. Y, en especial (¿Te creías que me había olvidado de tí?) , quería dar las gracias a mi hermana Génova, por ser mi compañera de aventuras allá dónde voy, por enseñarme todos los rincones escondidos de Granada y hacerme desear volver en cada instante, por aguantarme en los malos momentos y  en los no tan malos, por esos 45 min. mínimos que nos tiramos hablando siempre que nos llamamos (aunque nos hayamos tirado 1 hora hablando el día anterior), por ser mi compañera de exquisiteces, por todo, Gracias.
No puedo olvidarme de mis cordobeses, de Liss y Laura, por haberme apoyado desde que empecé mi carrera y estar siempre ahí. A tod@s aquellos descubrimientos nuevos, a mi compi Laura Arjona que tantas veces me ha suplicado que no me vaya de Erasmus. A mi nuevo descubrimiento, Isa, no sabes cuánto agradezco haberme colado en tus prácticas, porque sin quererlo te has convertido en una de mis mejores amigas, cuánto echo de menos esos desayunos pequeña, no lo sabes bien. Sólo decirte que VALES MUCHO, y que, cada vez que te mires al espejo, espero que veas la pedazo persona que veo yo. A Fafi, por haberme traído el ERASMUS a Córdoba, te voy a echar de menos, a Jesús, a Ángel y Ana, por las risas, los enfados, escucharme y por estar ahí para darme un abrazo... Y a tod@s aquell@s que han hecho que, este año en Córdoba esté siendo el mejor, Gracias. 
También dar las Gracias a MEICO y a IFMSA-Spain, por sembrar en mí este sentimiento crítico que me caracteriza, ese preguntarme todo de todo cuanto me rodea, potenciar el inconformismo que me caracteriza y darle sentido a una carrera que a veces parece un sinsentido. Gracias a Rafa, Rafaela, Manue, María, JdJ, Moscosio, Pau, Pilar, Manete, Álvaro, Julia Carmen, Guille, Ana, Rocío, Patricia, Juanca, Alejandro, Meri, Carmen, Gabri, Curro, el equipo del TNT en general y cualquiera que haya formado parte de alguna RN o RI o de algún debate de IFMSA. Sólo una frase podría resumir TODO lo que me habéis dado. "Piensa en Global, Actúa en Local." Por todo eso, Gracias.
Mención especial a viejos amigos como Lourdes, Rocío, o Déborah, por demostrar que estáis ahí cuando de verdad lo he necesitado, Gracias. No me puedo olvidar de Luis y de esa relación bipolarmente ambigua que solo podría tener con un amigo como tú. Por esos libros que siempre nos han unido.  Como dice Daenerys Targaryan a Jorah Mormont en uno de los libros de Canción de Hielo y Fuego "Es un día demasiado hermoso para discutir" Por todo eso, Gracias.
Gracias a tod@s los que habéis tomado alguna vez la misma parada que yo, que me habéis hecho pensar, crecer, amar, mejorar incluso caer, porque, como dice Nitzsche, "Lo que no te mata, te hace más fuerte" y yo lo corroboro. Gracias.
Y, por supuesto, no podía faltar dar Gracias a los que no están aquí conmigo, a los que me guardan desde allá donde estén. Porque, aunque no los vea a menudo, desde aquí, los sigo queriendo.
Sólo quiero que sepáis que, tod@s vosotr@s, fuísteis, habéis sido, sois o seréis uno de los porqués que me hacen seguir adelante, que me dan vida, porque, como dice Nietzsche "Aquél que tiene un porqué para vivir se puede enfrentar a todos los cómos"

Porque no tenemos que tener razones para dar un abrazo, un beso o para decir te quiero; porque como dice Vetusta Morla "Dejarse llevar, suena demasiado bien" Y, ¿hay algo más hermoso que dejarse llevar por los sentimientos?

GRACIAS POR TODO
Con Cariño
Os Quiere


Laura

viernes, 4 de enero de 2013

Un año nuevo que entra... Y, con él, miles de nuevos propósitos e ilusiones bordadas en nuestros labios, algunas, no tantas como creemos, de veras están fijas en nuestro alma...
Pero qué pasa cuando, aquel objetivo que teníamos cae irremediablemente en el olvido, o peor, cuando nos percatamos de haber incumplido nuestro propósito... Muchos se creen incapaces y abandonan...


La constancia es difícil, pero la clave de conseguir algo no sólo está en la perseverancia, sino en ser capaz de fallar, levantarse y seguir adelante.

viernes, 28 de diciembre de 2012

Recuerdos

A veces, el pasado llama a tu puerta y te traer recuerdos, bonitos o feos, sin pedir permiso, sin preguntarte... Simplemente irrumpe en tu vida y te saluda. Y eso ocurrió hace unos días... No sentí tristeza ni alegría, ni frío ni calor... quizás una pequeña nostalgia, una distante reminiscencia ya olvidada que rememoré, no sin cierto matiz de cariño...
Estaba colmada de felicidad, apenas podía creer que estaba cumpliendo uno de mis sueños... y, entonces, apareciste...  Y de golpe recordé aquel deseo, aquella predicción que vaticinaste hace ya más de un año, casi dos... Ahora se estaba cumpliendo "Tú tendrías que estar ahí, porque eres la más guapa" palabras de enamorado en tus labios...
Pero el pasado, sigue siendo pasado, y sólo sirve para recordarlo, sonreír y seguir hacia adelante con una nueva lección aprendida...

domingo, 29 de julio de 2012

Perdonar


Perdonar es de valientes, pero también de inteligentes, de personas abiertas y tolerantes… y yo puedo sentirme orgullosa de haberlo hecho. Orgullosa porque, perdonando, no sólo la perspectiva cambia, sino que los tonos pardos se vuelven más vivos y la paz lo inunda todo.
Sobre todo si perdonas a personas con las que habías tenido una relación profunda: de amistad, familiar, de amor… Porque, si en algún momento tuviste una relación con esa persona fue porque valió la pena, porque era alguien tan especial que consiguió arrancarte lo más valioso en esta vida, lo único que no podemos conseguir aumentar por nada del mundo, el tiempo.  Nuestro tiempo.

Y, si es así, perdonando consigues que los recuerdos sean más coloridos, más vivos, más reales... al no estar impregnados de ese rencor que lo emborrona todo. Ese rencor que aparece cuando no lo conseguimos. Un sentimiento muchas veces incontrolable, que sólo podemos hacer desaparecer cuando perdonamos.

Y, aunque el perdón no es fácil, aunque a veces lo parezca. Es algo tan hermoso que nos permite cambiar nuestro punto de vista. Porque cuando la relación con una persona se acaba no tiene porqué romperse para siempre, puede, ¿por qué no? Transformarse, cambiar, mutar… Quizás una persona no está hecha para ser tu pareja, pero si  podría ser tu mejor amigo. O puede que un amigo sea la persona que realmente debería amar. O quizás deberíamos dejar las etiquetas, los estereotipos y, simplemente, dejarnos llevar por las emociones, no poniendo las tradicionales barreras a las relaciones… sino las nuestras propias… porque todas las personas son un mundo, porque no hay una relación igual…

Quizás deberíamos dejarnos llevar, suena demasiado bien para no intentarlo, ¿no crees? 


Tomando el lado positivo


La mayoría de las veces, el camino que seguimos no es tan fácil como creemos. Los obstáculos aparecen de la nada y aunque muchas veces podríamos verlos venir con un simple vistazo a nuestro alrededor, estamos tan ensimismados en nuestro mundo, en lo que consideramos más importante, que finalmente nos sorprenden en el mejor de los casos.

La diferencia radica en saber afrontar los obstáculos y no hacer un océano de una simple gota de agua. Pero si, además, intentamos aprender de cada suceso, de cada situación, evento o pérdida, no sólo conseguiremos ser más felices sino que, además nos construiremos a nosotros mismos, nos haremos crecer.

jueves, 3 de mayo de 2012

Un Buen Día de Lluvia

Al salir de la facultad llovía, llovía a mares.... llovía... y yo sin paraguas. Comencé a correr, y la lluvia no paraba de golpearme, el viento me zarandeaba y los pies, mojados y entumecidos, se quejaban. Creí que me escurría. Navegaba en un mar de lluvia, naufragando en cada portal, en cada hueco, en cada techado. Cada vez que salía del lugar que me resguardaba y el agua me golpeaba sentía que me quemaba. Estaba empapada. 
Empecé a correr, corría apenas sin mirar hacía adelante intentando huir de aquella lluvia que me arrasaba. Y, en ese momento, un destello me iluminó la mente. ¿Por qué corro? ¿Acaso no me baño con agua cada día? ¿ Acaso no es el agua lo que me mantiene viva? ¿Acaso no es el agua  la que me hace relajarme en la playa? ¿No es ese mismo agua la que me ayuda a desahogar mi agonía en la piscina? Entonces ¿Por qué corro? ¿Qué pasa si me mojo? Paré en seco y comencé a caminar hacía mi destino, lentamente, paseando como si hiciera un buen día. Y, en verdad, lo hacía. Un buen día de lluvia. 
Ese mismo agua que hacía apenas unos segundos me abrasaba ahora me llenaba de vida, el pelo caía mojado sobre mi camisa y en mi rostro se dibujaba un sonrisa, una carcajada, una risa. En tan solo un momento, la lluvia había pasado de ser mi enemiga a mi amiga. ¿Qué era lo que había cambiado? Yo misma. 

A veces, vemos ante nosotros una circunstancia un hecho que nos ahoga, nos agobia, pero, ¿Realmente es éso lo que nos agobia o es nuestra forma de ver las cosas?

martes, 24 de abril de 2012


Todo lo que hacemos, todo lo que podemos hacer, Nuestra Vida, depende de las personas que nos rodean, la cultura, nuestra educación, en definitiva, de nuestro entorno... pero, al final, la forma que tenemos de tomarnos las cosas, de enfrentarnos a los obstáculos... dependerá de nosotros mismos. Está en nosotros.
Puede que, cuando en nuestra vida hay un cambio o sucede alguna eventualidad, necesitemos un tiempo para adaptarnos a ella. Pero, después de este tiempo, seremos nosotros mismos los que determinemos qué va a suceder a continuación... 
Y yo estoy en ese punto, porque, de veras, siento que... 
TODO ESTÁ EN MIS VENAS ;)




Letra de 'En mis venas', Supersubmarina

Ahora da la sensación
de que todo está en mis venas,
circulando en mi interior,
retorciendo mis arterias
Se quedó grabado hierro
en las yemas de mis dedos,
protegiéndome del roce
en el contacto con tu cuerpo.

Porque nada vale nada
en un lado o en el otro.
Se equilibra la balanza
y duele todo, tanto todo.

En un lado todo el daño,
todo lo bueno en el otro.
Pero tú nunca en el centro,
siempre haciendo algún destrozo.

Y ya no puedo coserme,
reinventarme ni quererme.
Ha sido todo tan raro,
sucedió todo tan fuerte.

Ahora da la sensación
de que todo está en mis venas.

Ley de la gravitación,
y al caerme me repongo.
Proyectándome hacia el cielo,
busco aire, encuentro polvo.

Porque nada vale nada
en un lado o en el otro.
Se equilibra la balanza
y duele todo, tanto todo.

En un lado todo el daño,
todo lo bueno en el otro.
Pero tú nunca en el centro,
siempre haciendo algún destrozo.

Y ya no puedo coserme,
reinventarme ni quererme.
Ha sido todo tan raro,
sucedió todo tan fuerte.